1. Eficiencia en el uso de recursos: Las casas modulares, construidas en fábricas, maximizan el uso de materiales, reduciendo el desperdicio y el impacto ambiental en comparación con la construcción tradicional.
2. Menor huella de carbono: La fabricación en entornos controlados y el transporte de módulos reducen las emisiones de carbono, minimizando el impacto asociado con la construcción tradicional.
3. Eficiencia energética: Las casas modulares son diseñadas para ser energéticamente eficientes, con características como aislamiento superior y paneles solares, reduciendo significativamente el consumo de energía.
4. Reutilización y reciclaje: Los sistemas modulares permiten la reutilización y reubicación de las estructuras, promoviendo la sostenibilidad y reduciendo los residuos de construcción.
5. Menor tiempo de construcción: La rapidez de la construcción modular disminuye la exposición a condiciones climáticas y reduce el impacto ambiental en comparación con métodos tradicionales.